Megan Fox asegura que su relación salvó a Machine Gun

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La actriz supo desde el momento en que vio a su actual novio que surgiría algo muy poderoso entre los dos, que ella ha equiparado ahora a enamorarse de un tsunami.

Aunque al inicio de su relación los dos fueron sumamente discretos, Megan Fox y Machine Gun han ido compartiendo poco a poco la plenitud que sienten al estar juntos, ahora, las nuevas declaraciones de la actriz dejan claro que está profundamente enamorada de Machine Gun.

Megan Fox describió el efecto arrollador que su nueva relación sentimental con el roquero Machine Gun Kelly ha tenido en su vida y los sentimientos que ha despertado en ella.

«Es lo mismo que estar enamorada de un tsunami o de un incendio forestal. La intensidad de fundirme con él es abrumadora, y plantea una amenaza tan poderosa y hermosa que no te queda más remedio que rendirte con devoción y gratitud», afirma la actriz en el artículo que la revista Nylon dedica a su novio, en el que también revela que él ha conseguido controlar sus tendencias más autodestructivas con su ayuda.

La pareja se conoció el pasado mes de marzo rodando el thriller ‘Midnight in the Switchgrass’, antes de que ella anunciara su separación de Brian Austin Green -el padre de sus tres hijos-, y la química entre ambos fue instantánea.

Si a su exmarido no le hizo ninguna gracia que Megan proclamara en una publicación de Instagram que su corazón pertenecía por completo a MGK, como demostró al parodiar esa afirmación en su propia cuenta usando fotos de sus hijos, lo más probable es que tampoco le guste descubrir que la intérprete ha descrito ahora su historia de amor con el joven músico como algo que solo sucede «una vez en la vida» y que alcanza «proporciones épicas».

«Cuando le miré a los ojos, sentí que tenía un espíritu puro, amable e inmaculado. Me rompió el corazón inmediatamente y supe con certeza que estaba en un problema», añade Megan.

El rapero fue el primero en gritar a los cuatro vientos su amor en un par de entrevistas y posteriormente con fotografías frente al espejo, confirmando así lo que era un secreto a voces.